Lo más hermoso de publicar «Stellita y su ángel de la guarda» ha sido conocer a tantos niños y jóvenes con Síndrome de Down desde que lo presenté en la Feria Internacional del Libro de Panamá, en 2022.
A los niños los he visto crecer y, sobre todo, he creado lazos con sus madres a través de los Encuentros de Amor, que inicié en 2023 y que, este octubre, llegarán a su novena edición.
Con los jóvenes ha sido diferente: con sus personalidades ya formadas, cada uno me ha enseñado a tratarlos y a conocerlos. El primer contacto que tuve con ellos fue en marzo de 2023, durante el Festival de Literatura Infantil y Juvenil organizado por MiCultura en Albrook All.
Allí presenté el acto Ven a bailar con Stellita y su ángel de la guarda, donde niños y jóvenes actuaban en tarima. Fue un reto enorme, pero lo logramos gracias al apoyo de padres, grupos pro inclusión y de Silvia Fernández-Risco, editora del libro. En esa ocasión, por primera vez, fui maestra de ceremonias en un evento masivo.
El brillo de Belén
Entre los jóvenes, destacaba una chica alta y delgada, de lentes negros, cabello largo y flequillo. Rápidamente tomó un pompón morado, su compañero en escena, me hizo una seña con los dedos y, riéndose, corrió a pararse muy cerca de mí. Yo no pude evitar abrazarla.
Su nombre: Belén Machuca.


Luego nos volvimos a encontrar en las pasarelas inclusivas organizadas en 2023 y 2024 por @sdpadresenacción en Town Center. En 2023 pude entrar al camerino antes del desfile. Cuando Belén me vio, corrió a hacerme su seña característica. Allí nos tomamos fotos junto a sus amigas. En los desfiles, Belén destacaba con su porte elegante y la energía que irradiaba en cada salida a escena.




También compartimos momentos en Impulsa, la fundación en Panamá que promueve la autonomía de personas con discapacidad intelectual y contribuye a mejorar su calidad de vida, fundada en 2023 por Mirella Arias. Cada vez que me veía, repetía su seña, me regalaba su bella sonrisa y yo no podía dejar de abrazarla.

La última vez que la vi fue en un evento de recaudación para Impulsa: Moda con propósito. Belén, rostro de la campaña, lucía un vestido amarillo que resaltaba su cabello negro. Se movía con seguridad, como una anfitriona natural. Ese día también estaba Mena Eleta y Patty, su mamá.


Una despedida inesperada
Hace unos días, Belén se desmayó durante clases en Impulsa, el lugar que tanto amaba. No pude dejar de pensar en Patty en esos momentos de incertidumbre. Una semana después, falleció. Se desprendió de esta vida terrenal de forma impactante.
Como todos los que la conocimos sentí una sacudida y un dolor inmenso. Estoy segura de que Belén ya alegra el cielo con su sonrisa, pero para una madre, perder a una hija —y más a una tan llena de vida— dicen que es un dolor indescriptible.
Por supuesto, asistí a su despedida para acompañar a Patty, expresarle mi dolor y decirle que la tenía en mis oraciones. La ceremonia, en el auditorio de Impulsa, fue hermosa: Patty recibiendo a todos en la entrada con fortaleza y hasta dando palabras de aliento, la música, la conducción de la tía de Belen de una forma que nos introdujo a todos en una especie de viaje por la vida de Belén, el sermón del sacerdote, la presencia de sus amigos y su familia.
las palabras al final, en especial las de Patty denotaron que en medio del dolor lo que reina es el amor y la luz que Belén dio a todos y que su sonrisa seguirá iluminándonos… es la fuerza que da Dios y sin duda Belén que como dijo la canción que interpretó su profesora en el cierre: Belén fue un ángel que estuvo con todos, un ángel para un final.
Su despedida: fue un tributo hermoso a su vida.

El sacerdote nos recordó que los cristianos tenemos la certeza de la vida eterna, pero que también debemos vivir el duelo con intensidad. No se puede huir del dolor que deja su ausencia, ni del peso de su partida tan temprana.
Algo muy significativo fue el detalle que le entregaron a todos los jóvenes que estaban en la ceremonia: el origami de una grulla para que formularan un deseo, lo elevaran y lo dejaran juntos a las cenizas de Belén. Un símbolo de esperanza de que Belén estará ahora velando por cada uno.

Belén de Los Ángeles
Hoy dejo por escrito y en fotos los momentos que tuve la dicha de compartir con ella, con la esperanza de que sirvan de consuelo a sus seres queridos y de testimonio del amor y la luz que Belén irradió a todos los que la rodearon.
En la celebración supe que su segundo nombre era Belén de Los Ángeles.
Como dijo el sacerdote:
Belén, como un ángel, seguirás cuidando a todos desde el cielo.
Y yo pienso que allá te has encontrado con Stellita y su ángel de la guarda. Me encantaría asomarme, aunque fuera por un huequito, para ver lo que estarán tramando allá arriba.

Nuris Bendiburg
muy hermosas palabras Tere
Myrna de carles
Tere q belleza compartir con nosotros testimonios de amor. No la conocí pero a través tuyo la amé enseguida. Ahora Belén De Los Angeles disfruta de las bellezas del cielo. Stellita tiene una nueva amiga.
Clarisa Kelley
Tere muy bonito artículo y recuerdo de Belen 🙏y el evento que participó y siempre estaba alegre.
Victoria González
Agradecida por este testimonio tan lindo, lleno de sonrisa y esperanza. Consuelo y fortaleza para sus padres y familia.
Patricia Camino de Ocando
Hola! Escribistes todo. No hay palabras para describir un ser tan excepcional.
Gracias por compartir.
Saludos
Marta M
No conoci a Belen pero por tu escrito Tere, dejo una huella en esta vida.
Paz a su alma y fortaleza para Patty
Teresa Azcarraga
Buenas tardes Tere, que hermoso escrito sobre la vida de Belen y toda su trayectoria. Seguira en el corazon de los que tuvieron el privilegio de conocerla. Dejo una huella imborrable en todas las actividades. Gracias por compartir esta hermosa historia. Siento mucho tu perdida. Cariñosamente, Teresita